De lo cerca y de lo lejos que está Madrid.

15 de febrero, ha quedado atrás medio febrero y por tanto en una semanita  estamos a dos meses de Madrid.
Dos meses y una semana, puede parecer poco o puede parecer mucho, según se mire. Puede parecer cerca o puede parecer lejos, según se mire.

Podemos ver el Maratón de Madrid como una montaña muy elevada que nos costará sangre, sudor y lágrimas subir, o por el contrario, como una bajada que haremos casi silbando, según mire.

En mi humilde opinión, es cuestión de mentalización. Esto es, dos meses y una semana para Madrid, es tiempo más que suficiente para preparar el Maratón, puesto que no se parte de cero. Ahora bien, si uno empieza a perezosear, hoy no salgo, mañana en lugar de hacer 12 km, me conformo con 8, el domingo no haré larga, si acaso el siguiente. Entonces, si que se puede hacer esa montaña, hacerse insufrible.

Pero como aquí no estamos para sufrir, como consideramos que eso de los valles de lágrimas (con todos mis respetos, eso si), son cosa del pasado. Nos lanzaremos de cabeza a no saltarnos un entreno, a hacer 12 si tocan 12, a no saltarnos la larga del domingo, ha hacer las series cuando toca y a comenzar a visualizar la meta de Madrid, pasando por debajo del reloj cuando el primer dígito todavía no ha llegado al 3.

Y para ello nada mejor que ver el recorrido:

http://es.competitor.com/files/2012/02/recorrido_madrid.pdf

O la altimetría:

http://es.competitor.com/files/2012/01/ALTIMETRIA_MARATON.pdf

Ir haciéndose uno poco a poco la idea, de las subidillas y quitarse el canguelo.

Que la fuerza os acompañe.